En Delhi viven 19 millones de personas, muchas viven en la calle distribuyéndose las obras de la ciudad por tramos;otras, en cambio, demuestran que el segundo país más poblado del mundo está viendo subir su clase media como la espuma. En uno de los templos sijs más importantes de la ciudad, miles de personas esperan para obtener un plato de comida mientras escuchan enseñanzas. Y los martes, día del dios mono Hanuman, otros tantos mendigos esperan las ofrendas sobrantes que se reparten a las puertas de un populoso templo.