En el colegio mayor Pío Baroja se van a producir importantes cambios. Willy, el más veterano de los residentes, es reclamado para administrar las fincas de la familia. Como despedida decide organizar un concurso, cuyo ganador heredará su mítico dormitorio.
Rosa aparece en el colegio, en un taxi y con sus maletas, después de haber estado esperando a que su padre fuera a recogerla a casa, pues a su madre le ha salido un trabajo en Barcelona.
Irene se prepara para un casting; eso le crea problemas en sus estudios. Ángel le anima a que lo intente.
Al Pío Baroja llega una nueva y estricta gerente enviada por el patronato. La rivalidad entre Luis y ella dará lugar a las más dispares situaciones.
Carmen es perseguida por su madre que, tras enterarse de que está viviendo con Luis, le ha ordenado que se casen inmediatamente.
Willy regresa del pueblo para prepararle a Luis una despedida de soltero inolvidable. Felipe tiene problemas con Hacienda y será la persona que menos se imagine, Paz, quien le ayude a salir del atolladero.
Para la boda han venido los padres de Carmen y el padre de Luis. La madre de Carmen está dispuesta a organizar todo y a todos.
Carmen y Luis están en viaje de novios. Celia se ocupa de atender a sus hijos, lo cual no es muy fácil.
Felipe está atendiendo a un inspector de Sanidad, amable a primera vista, pero que luego emite un informe muy negativo sobre la situación del bar del colegio.
Ángel comenta con sus dos compañeros de cuarto los enfrentamientos que mantiene con un profesor de la universidad llamado Guerra, del que todos sus alumnos están descontentos.
Los amigos de Onofre, el conjunto Erukto Interior Bruto, van a dar un concierto en la sala Sobako. Pero al ser clausurada, deciden dar el concierto en el hall del Baroja.
Carmen encuentra un trabajo y ante las perspectivas de nuevos ingresos la familia decide cambiar de coche.
Fran tratará de convencer a Luis para que no tema la sencilla operación a la que tiene que someterse.
Felipe va perdiendo oído con los años, pero se niega a reconocerlo y rechaza el sonotone que le regala Asun.
Marga ha perdido su diario íntimo. Onofre lo encuentra e intenta que Javi utilice la información para enamorarla.
Luis, que desea tener otro hijo, convence a Carmen, tras un embarazo frustrado, para adoptar uno.
Onofre convence a Javi para que haga sus ejercicios para un examen mientras él se dedica a preparar un concierto.
Carmen acude en compañía de su jefe, con quien mantiene una buena relación amistosa, a una cena de trabajo. Luis se siente amenazado e inseguro.
Carmen y Luis han conseguido adoptar un niño con serios problemas familiares.
Dani, amigo de Ángel, visita el colegio para hacer un curso y se suceden las reacciones de los residentes.
La adopción de Néstor y su adaptación al colegio y a la familia vuelven a suscitar el problema del racismo.
Ángel se encuentra en el bar del colegio desayunando cuando ve aparecer a su madre, que ha venido para arreglar un tema de patrimonio ante Hacienda.
Luis va a cumplir 41 años y ahora nota de verdad la llamada crisis de los 40.
Se acercan las fechas de los exámenes y en el colegio se detecta el grado de estrés por el que están pasando sus habitantes.
Luis y Carmen están asustados por el coste del recibo del teléfono. Cuando indagan, ven que hay un teléfono en la factura que se repite muchas veces.
Willy ha reunido en el bar del colegio a sus compañeros para organizar una porra, cuyo ganador será quien acierte el número de suspensos que va a haber entre todos los habitantes del colegio.
