Presvet es el nombre de la base de datos estatal contra la que protestan desde hace semanas los veterinarios en España. La normativa obliga a informar los antibióticos que administran a sus pacientes y a comprar en farmacias lo que antes daban en dosis justas. Los veterinarios sostienen que la medida pone en cuestionamiento su criterio clínico, aumenta la burocracia y, en ciertos casos, el precio del tratamiento de las mascotas. Nos lo cuenta Esther Sánchez, del equipo de clima y medio ambiente.