Muchos científicos que huyen o quieren huir de los recortes y las presiones de la Administración Trump, entrevistados por EL PAÍS, aseguran que estos tiempos les recuerdan a la Alemania de los años treinta, cuando mentes brillantes como la de Albert Einstein abandonaron Europa rumbo a Estados Unidos. La diferencia es que ahora el camino se hace en sentido inverso. La Unión Europea tiene un plan, y el gobierno de España acaba de incrementar el programa ATRAE, destinado a investigadores que quieren venir.