Tomás entrega su renuncia, pero antes, como jefe de los mineros, despide a Gabriela para evitar que muera en otro derrumbe. Ella vuelve a la mina y le pide su trabajo de vuelta a Alejandro. Él acepta, sin poder disimular lo que siente por ella.
Tomas resigns to the San Pedro mine for good and bids Gabriela goodbye to keep her from dying in another collapse. She goes once again to the mine to ask Alejandro for a job, and he accepts, unable to conceal his feelings for her.