Irene y Alejandro hacen el amor, mientras que Gabriela sueña que disfruta de una noche de pasión con su patrón. Ante las acusaciones de Antonia, la minera defiende con entereza a su padre. Fernando sigue atormentado y busca el consuelo de su madre.
Gabriela defends her father vehemently against Antonia's accusations. Fernando is tormented, but Antonia calms him by denying his suspicions. Irene and Alejandro make love and she later kisses him in front of Gabriela.