El traslado de los restos de José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange muerto por los republicanos al principio de la Guerra Civil, marca el comienzo del mito del “Ausente”. Las imágenes del Desfile de la Victoria por las calles de Madrid son otro momento clave de los primeros años del franquismo. Paralelamente a las celebraciones, algunos artistas afines al Régimen hacen su aportación personal. Es el caso de la cantante Celia Gámez, que responde al “No pasarán” con su chotis “Ya hemos pasao”.
Entre las imágenes del año, destaca la de la despedida que brinda Roma al rey Alfonso XIII, exiliado desde 1931. Antes de morir, cede sus derechos sobre la Corona a su hijo Juan. También quedan retratados por las cámaras de los noticieros los jóvenes falangistas que comienzan a hacerse fuertes en las escuelas y universidades. Y en el extranjero, la Guerra se complica con la entrada de Estados Unidos y Japón, mientras España sigue apoyando a nazis y fascistas.
Las emisiones del NO-DO comienzan de forma oficial el 4 de enero de 1943, después de que la Vicesecretaría de Educación Popular lo crease “con el fin de mantener, con impulso propio y directriz adecuada, la información cinematográfica nacional”. A partir de este momento, la melodía de clarines y trompetas que anuncian el noticiero se convertirá en la banda sonora de varias generaciones. Mientras, el Generalísimo realiza una gira triunfal por todo el país.
España está pendiente del desembarco aliado en Normandía y de las derrotas del ejército nazi ante soviéticos, ingleses y estadounidenses. Franco insiste en su neutralidad y lo demuestra cortando el suministro de wolframio a Alemania. La escasez de gasolina empieza a ser alarmante: los pocos coches que hay funcionan con gasógeno (un sistema para producir energía a partir de carbón o leña) y ni siquiera pueden desfilar los vehículos militares. El NO-DO desdramatiza la situación mostrando las ventajas del transporte postal por ferrocarril.
En los tiempos en que el hambre azota al país por el aislamiento, el fútbol empieza a ser el entretenimiento para las masas. La dictadura promueve un partido de fútbol entre la selección española y su vecina portuguesa, que sirve además para reforzar los lazos con uno de los aliados de Franco durante la Guerra Civil. Del mismo modo, las revistas de variedades y estrenos cinematográficos, como “Primer Plano”, crean una nueva pléyade de estrellas, jóvenes actores y actrices que divierten al pueblo con sus comedias.
Frente a las presiones internacionales, el Movimiento organiza manifestaciones “espontáneas” de apoyo a Franco, como la que recorre Madrid en diciembre con el lema: “Franco sí, comunismo no”. El NO-DO recoge el momento de esta forma: “Inmensa riada humana, donde arden los vítores y las canciones patrióticas, avanza en oleada incontenible para decir al mundo cómo España permanece en pie junto al Jefe del Estado que supo llevar a feliz término la cruzada liberadora contra el comunismo y mantener en todo instante la paz, la dignidad y la soberanía de la patria”.
Franco convoca un referéndum sobre la Ley de Sucesión. Mediante esta consulta, se mide la adhesión popular a una ley que establece la perpetuación de Franco en la Jefatura del Estado hasta que él mismo decida el momento del retorno de la Monarquía y la persona en que será encarnada. El resultado es favorable a Franco. “Los obreros del antiguo cinturón rojo de Madrid, esperanza del comunismo internacional, desprecian la insistente consigna extranjera que les exigía un voto desfavorable”, recoge el NO-DO. Es el año que los españoles lloran la muerte de Manolete en la plaza de Linares y Eva Perón visita España como una Vedette de la política.
En 1948 visita España Alexander Fleming, descubridor de la lisozima y, sobre todo, de la penicilina. El científico escocés acaba de recibir el premio Nobel de Medicina (1945) por el hallazgo del primer antibiótico conocido por el hombre. Es el mismo año en que el pequeño don Juan Carlos, hijo de don Juan, se traslada a España para estudiar. En el terreno económico, destaca el comienzo de la aplicación del “Plan Marshall”, que repartió 13.000 millones de dólares entre los países de Europa Occidental damnificados por la Guerra, a excepción de España.
Además de las hazañas deportivas de la selección española, entre las que destaca la victoria a domicilio a Francia por 1-5, los noticieros glosan los avances de la industria española. Uno de ellos es la construcción del primer avión de transporte totalmente español. En lo referente a cultura, destaca la visita del escritor Ramón Gómez de la Serna “Ramón”, el célebre autor de las greguerías, a Madrid desde su retiro argentino de Buenos Aires, donde se exilió durante la Guerra Civil, de cuya conclusión se cumplen 10 años.
La imagen más importante del año hay que buscarla en el gol de Zarra (en la foto) ante Inglaterra, “la pérfida Albión”, en la fase final del Mundial de fútbol de Brasil. Aquel “pase a la red” consigue que España alcance el mejor resultado en un mundial: un cuarto puesto. Aunque este hecho es importante para Franco, mucho más lo es la boda de su única hija, “Carmencita”, con el doctor Martínez-Bordíu, marqués de Villaverde, en el Palacio del Pardo. Mediante este enlace, los nietos del dictador pasarán a formar parte de la nobleza.
La VI Flota americana desembarca en España, síntoma de la mejoría de relaciones entre Madrid y Washington. El 27 de febrero nace en Madrid, exactamente en el Palacio del Pardo, Carmen Esperanza Alejandra Martínez-Bordíu Franco, primera nieta del general. La “nietísima”, como se la conocerá, estará presente en numerosas estampas familiares, sobre todo navideñas, junto a sus seis hermanos: María de la O, Francisco (“Francis”), María del Mar, José Cristóbal, María Aranzazu y Jaime Felipe. Los siete descendientes del militar serán, pues, personajes frecuentes en los reportajes e informaciones del Noticiero Documental.
El final de la autarquía económica trae consigo otro final, el de la cartilla de racionamiento. Pan, aceite y carne se convierten en bienes a los que puede acceder todo el mundo de forma natural. Con el auge del turismo comienza la llegada de nuevas costumbres, por lo que se organiza un “vía crucis” en penitencia por los pecados de inmoralidad cometidos en las playas. Y el Barcelona arrasa en Liga y en Copa del Generalísimo, gracias a la incorporación del húngaro Ladislao Kubala.
Las excelentes relaciones entre Iglesia y Estado son patentes en actos como el que preside Franco en Madrid, en el que impone las birretas cardenalicias a los arzobispos de Tarragona y Santiago de Compostela. Este mismo año, España firma un concordato con la Santa Sede por el que el Gobierno se compromete a que la religión católica sea la única oficial. Además, se mantienen las normas de 1941, por las que el Jefe del Estado tiene la potestad de elegir el obispo de una terna presentada por el Vaticano.
Como prueba del apoyo político y militar que España brinda a Estados Unidos en Europa occidental, Franco asiste a las maniobras de la Sexta Flota estadounidense en Cartagena. A bordo de uno de los buques destacados en el Mediterráneo, el “Generalísimo” le envía el siguiente telegrama a Eisenhower: “Me complazco en enviar a vuecencia con los sentimientos más amistosos de la nación española la expresión de alta consideración y sentido afecto.” Las buenas relaciones se consolidan con la visita del teniente general Muñoz Grandes a Estados Unidos. Mientras tanto, en el país empiezan a vislumbrarse tiempos de bonanza económica.
El III Congreso Nacional de los Trabajadores muestra tímidos avances en la mejora de la situación de los proletarios. Los dirigentes del Sindicato Vertical aceptan las peticiones obreras y aprueban tres reivindicaciones: “a igual trabajo, igual salario”, seguro de paro y salario mínimo. A pesar de esta aprobación, los dirigentes del Sindicato retrasan la puesta en marcha de estas medidas, por lo que los obreros deciden protestar mediante una acción a la que todavía no tienen derecho: la huelga. Mientras, el país se rinde a todo un fenómeno: “Marcelino pan y vino”.
La independencia de Marruecos provoca la retirada de la principal posesión española en Africa. Desde este momento, sólo quedan las colonias de Guinea, Río de Oro (futuro Sahara Occidental) y el enclave de Ifni, ubicado en el nuevo estado marroquí. Tras haber colaborado juntos, Bardem y Berlanga cosechan éxitos por separado en el festival de Venecia con “Calle Mayor” y “Calabuch”. Y el Real Madrid consigue la primera de sus cinco copas de Europa consecutivas gracias al juego de Alfredo Di Stefano, la sensación futbolística del momento.
La reactivación económica del país, que en el futuro será denominada “el milagro económico español” comienza a notarse en dos aspectos. Por un lado, los tecnócratas entran en el gobierno de Franco. Por otro, sale de la fábrica de Barcelona el primer modelo del “600”. Este minúsculo coche, versión española del FIAT “Seicento”, revoluciona las carreteras españolas, al convertirse en el utilitario de la clase media. El nombre viene por el motor, que en principio tiene 600 ccc, con una potencia de 21 caballos.
España abandona definitivamente la autarquía y se incorpora a la Organización Europea para la Cooperación Económica (OECE). Una delegación de este organismo visita España. De esta forma se pone fin a los principios económicos que el falangismo había marcado desde el final de la Guerra Civil y comienza una nueva etapa, la del desarrollismo, que el régimen calificará de “milagro económico español”. Mediante este proceso, que durará hasta comienzos de los años 70, España pasará a ser la décima potencia industrial del mundo.
Las buenas relaciones entre el gobierno franquista y el de Estados Unidos se ponen de manifiesto una vez más con la visita del presidente Dwight E. Eisenhower a España. La estancia del mandatario estadounidense da para varias fotos en Madrid y lhttp://www.megaupload.com/?d=VR14A2V7a base de Torrejón de Ardoz, que empieza a funcionar bajo control norteamericano. Otra de las imágenes más recordadas de 1959 es la victoria de Federico Martín Bahamontes en el Tour, primer triunfo español en la carrera ciclista más importante del mundo.
Gracias a su gran figura, Alfredo Di Stefano (en la foto), el Madrid ganará este año su quinta Copa de Europa consecutiva. Los aficionados vibran con las grandes proezas del club blanco. Con el comienzo de la década, empiezan a llegar las primeras afluencias masivas de turistas. Las playas, el sol y los precios económicos respecto a sus países de origen favorecen el “desembarco”. Este hecho resulta sumamente positivo, al proporcionar una notable fuente de divisas.
Se aprueba el III Plan Nacional de Vivienda para el periodo 1961-1975. Debido a la elevada emigración del campo a la ciudad, comienzan a florecer en las grandes ciudades barriadas de chabolas e infraviviendas. Para atajar este problema, se desarrolla el más ambicioso plan de vivienda del franquismo. En un periodo de 14 años, se construirán más de 4 millones de viviendas, de las que más de la mitad son de protección oficial, fácilmente identificables por el yugo y las flechas que presiden su placa identificativa.
La boda del año tiene lugar el 14 de mayo en Atenas. Don Juan Carlos de Borbón contrae matrimonio con doña Sofía de Grecia y Dinamarca. La ceremonia se realiza en los ritos católico y ortodoxo. Tras el gran revuelo causado dos años antes por la boda del rey Balduino de Bélgica con la madrileña Fabiola de Mora y Aragón, los españoles viven otro enlace real. Detrás de la celebración, un continuo tira y afloja entre diferentes fuerzas: Don Juan de Borbón y Franco, la Iglesia Católica y la ortodoxa.
España firma los acuerdos del GATT (General Agreement on Tariffs and Trade, en español “Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio”). De forma paralela, Roma acoge el Concilio Vaticano II que pretende modernizar la Iglesia. Con estas reformas, las misas en latín, los viejos catequismos, los curas con hábito y muchas de las reglas que regían el día a día de millones de católicos españoles pasarán a formar parte del baúl de los recuerdos.
En lo económico, se proyectan los Polos de Desarrollo. Y en lo político, todo el “Movimiento” se vuelca en los actos conmemorativos de los 25 años de paz (en la foto). Franco inaugura la exposición “España 64” y preside el 24 de mayo el desfile militar. Como colofón a los fastos, la selección española vence en la final de la Eurocopa, que se celebra en el Santiago Bernabeu de Madrid, a la Unión Soviética. El “demonio rojo” es derrotado en un golpe sumamente efectista.
Al mismo tiempo que los tecnócratas continúan avanzando, los noticieros recogen los dos conciertos de los Beatles. Para el NO-DO, el cuarteto de Liverpool es otra nefasta influencia extranjerizante que conviene ridiculizar. Por eso, y aunque se detalla la visita del grupo a diversos lugares, las referencias a los “melenudos” y a los “del flequillo” son continuas. La asistencia de espectadores no es especialmente notable y, como relata el Ministerio de Información, el público "se tomó las cosas con mayor filosofía que en otras latitudes".
El TALGO bate los 200 kilómetros por hora y un joven deportista español parece subir con la misma velocidad. El tenista Manolo Santana, que ya había ganado los torneos de Roland Garros en 1961 y 1964, se convierte en el único español en vencer sobre la hierba de Wimbledon. La final es contra el estadounidense Dennis Ralstom, y el resultado es 6-4 11-9 6-4. Durante 40 años, hasta la irrupción de Rafael Nadal, ningún otro tenista español logrará llegar a la final de este título del Grand Slam.
Franco nombra vicepresidente del Gobierno al almirante Luis Carrero Blanco. Pedro Carrasco se proclama campeón de Europa del peso ligero, y Pepe Legrá se hace con el título europeo de los pesos pluma. En el Zoo de Barcelona, un nuevo habitante centra la curiosidad de niños y mayores. Se trata de Copito de Nieve. Estalla la guerra de los Seis Días. López Rodó presenta su proyecto de II Plan de Desarrollo y los medios destacan las noticias del sector industrial como indicadores del crecimiento económico. A los noventa y tres años, muere en Madrid José Martínez Ruiz, "Azorín". Un de las diez películas más taquilleras del momento es Los chicos del Preu que recrea un ambiente estudiantil alejado de los conflictos universitarios.
La victoria de España en Eurovisión no está exenta de polémica. En principio, la canción “La, la, la”, compuesta por el Dúo Dinámico, iba a ser cantada por Joan Manuel Serrat, joven cantautor catalán que empezaba a despuntar. Sin embargo, a última hora es sustituido por Massiel, una madrileña que tiene que aprenderse la canción en unos pocos días. Al parecer, Serrat pide interpretar su canción en catalán, lo que provoca un enorme enfado del dictador. Como resultado, el músico estará vetado en radio y televisión durante seis años.
Las Cortes designan al príncipe Juan Carlos de Borbón sucesor del Jefe de Estado. Previamente, el futuro rey había aceptado públicamente el sistema sucesorio de la Ley Orgánica. El 23 de julio el príncipe presta juramento de lealtad a Franco y a los principios del “Movimiento” ante las Cortes. Las poco fluidas relaciones entre Don Juan de Borbón, padre de Juan Carlos, y Franco hacen posible el salto sucesorio. Este hecho provoca una crisis dentro de la familia real, ya que el Conde de Barcelona no renunciará a sus derechos sucesorios hasta 1977.
Frente a la democracia de los países europeos, Franco propone otra "democracia" basada en el "tercio familiar": sólo un tercio de los representantes son elegidos por voto popular. En lo que respecta a cultura, es el año de la reforma educativa de Villar Palasí, ministro de Educación desde el año anterior. Mediante la nueva ley, se establece la educación obligatoria hasta los 14 años.
Con su "salto de la rana", Manuel Benitez "El Cordobés" representa el nuevo toreo. Desaparecen el Instituto Nacional de Colonización, el Servicio Nacional de Concertación Parcelaria y Ordenación Rural, y la Dirección General de Colonización y Ordenación Rural. Para sustituir a todos estos organismos, aparece el Instituto Nacional de Reforma y Desarrollo Agrario (IRYDA). El instituto se ocupará de la puesta en regadío de terrenos, la reforma de explotaciones, y las mejoras de la red viaria.
El “milagro económico” español sigue creciendo gracias a tecnócratas como López Rodó (en la foto). De un lado, se inaugura en Vandellós (Tarragona) la primera central nuclear de España. Además, se fusionan las dos empresas aeronáuticas españolas: CASA e Hispano Aviación. Y, además, continua la riada humana de turistas. Por otro lado, comienzan las exportaciones de Fosbucraa, la compañía que explota en el Sahara español uno de los principales yacimientos de fosfatos de todo el mundo. Debido a esta explotación, la ciudad de El Aaiún alcanza un breve florecimiento económico.
El mismo día en que Carrero Blanco es asesinado por ETA se inicia el Proceso 1.001 contra los dirigentes de Comisiones Obreras. El juicio, en el que se llegan a pedir 160 años de cárcel para los acusados, despierta la solidaridad de los trabajadores. El mayor juicio al sindicalismo español se salda con penas algo menores a las pedidas, a pesar de lo cual Marcelino Camacho es condenado a seis años de cárcel y Nicolás Sartorius a cinco, mientras observadores extranjeros vigilan el proceso.
Franco da el primer susto el 19 de julio. Aquejado de una flebitis, ingresa en el hospital por su propio pie, aunque en zapatillas. La situación obliga a que el príncipe Juan Carlos asuma provisionalmente la jefatura de Estado. El 30 de julio, una vez superada la enfermedad, el “Caudillo” vuelve a ocupar su puesto. Las especulaciones son continuas durante esta primera enfermedad de Franco. Poco a poco la censura comienza a perder poder y los españoles asisten al "destape" de muslos, pechos y demás anatomía en películas y revistas.
En la memoria de muchos están las imágenes de Arias Navarro, anunciando con lágrimas en los ojos el fallecimiento del “Caudillo” con este discurso: “Españoles: Franco ha muerto. El hombre de excepción que ante Dios y ante la Historia asumió la inmensa responsabilidad del más exigente y sacrificado servicio a España ha entregado su vida, quemada día a día, hora a hora, en el cumplimiento de una misión trascendental. Yo sé que en estos momentos mi voz llegará a vuestros hogares entrecortada y confundida por el murmullo de vuestros sollozos y de vuestras plegarias”.
Mientras el gobierno de Adolfo Suárez inicia el proceso de transición a la democracia, los españoles empiezan a convivir con los nuevos símbolos del Estado. Uno de los primeros es la sustitución de la efigie de Franco en las monedas. En 1976 ya empiezan a circular pesetas con el busto del Rey Juan Carlos. Además, se reestablecen las relaciones con la Unión Soviética, cortadas desde la Guerra Civil, con el envío de embajadores y el inicio de servicios aéreos entre Madrid y Moscú.
El periodo que sigue a los casi 40 años de dictadura se le conoce popularmente como la "Transición", que va de la presidencia de Suárez a la de de González (en la foto). Se trata de un proceso en el que se asentaron los cimientos del actual sistema democrático que rige España y que no estuvo exento de problemas y dificultades. Los sucesos de Montejurra, el asesinato de abogados laboralistas en la calle Atocha, el recrudecimiento de la violencia de ETA o la crisis económica que se arrastra desde 1973 fueron obstáculos en este camino a la democracia, que aún hoy se está construyendo.